viernes, 5 de junio de 2009

El programa 'Cultura en la Plaza' de la Diputación llegará a 22 municipios salmantinos

La época estival concentra parte de las actividades culturales auspiciadas por la Diputación de Salamanca, como son los programas 'Cultura en la Plaza', que alcanza su sexta edición, y los 'Encuentros de Verano'
05/06/2009

El patio de La Salina, lugar de encuentro y cultura
Un total de 22 municipios de nuestra provincia acogerán en los próximos meses de julio y agosto del presente año alguna de las actividades culturales que se vienen desarrollando en la provincia durante los meses estivales, organizados por el Departamento de Cultura de la Diputación de Salamanca dentro del programa 'Cultura En la Plaza', que en este año alcanza su sexta edición. La Comisión de Cultura de la Diputación de Salamanca ha dado el visto bueno, en su reunión de hoy, a la propuesta de municipios que han de acoger en los meses señalados las actividades de este programa cultural, que viene a complementar las actividades del programa "Encuentros de Verano".

El programa 'Cultura en la Plaza' se mantiene en esta sexta edición como una oferta definitivamente consolidada, basado en los buenos resultados obtenidos en las ediciones pasadas, y ante la necesidad de seguir atendiendo a los municipios más pequeños, que no disponen de las infraestructuras culturales necesarias para el desarrollo óptimo de otros programas estivales. El programa, que les permite abordar en un fin de semana tres actividades culturales al aire libre, llegará este año a municipios menores de 250 habitantes que no hayan participado nunca en este mismo programa. Se trata de los municipios de Aldearrodrigo, Aldeavieja de Tormes, Beleña, Casas del Conde, Cerezal de Peñahorcada, Coca de Alba, Diosleguarde, Gajates, Golpejas, Juzbado, Madroñal, Malpartida, Monforte de la Sierra, Moronta, Puebla de Yeltes, El Sahugo, Saldeana, El Tejado, Valderrodrigo, Villalba de los Llanos, Villaseco de los Gamitos y La Zarza de Humareda. Estos municipios acogerán cada uno de ellos 3 de las 66 actividades al aire libre de que se compone el programa entre música, teatro, cine y danza. Cuenta con una dotación presupuestaria de 75.000 euros aportados íntegramente por la Diputación, y destinados al abono de los cachés de los artistas, así como de los derechos de la Sociedad de Autores en su caso.

En el pasado año de 2008 asistieron a las actividades de este programa un total de 12.270 espectadores, arrojando una media de 177 personas por espectáculo, lo que significa que a la mayoría de los actos acudió prácticamente la totalidad de los habitantes de cada localidad, ya que son municipios que en su mayoría rondan los 250 habitantes. Desde que se iniciara este programa, hace con esta edición 6 años, serán 103 los pueblos a los que haya llegado el programa y 309 las actividades culturales en ellos desarrolladas.
http://www.salamanca24horas.com/noticias/el-programa-cultura-en-la-plaza-de-la-diputacion-llegara-a-22-municipios-salmantinos-8511.html
Fecha: 05 de junio de 2009
Fuente: Salamanca24h.com. Autor: Luis Falcón.

jueves, 7 de mayo de 2009

Francisco Rodríguez Regalado (Salesiano. 4-7-1921 - 14-4-1979)




Nuevo párroco en Cerezal de Peñahorcada


La Diócesis más pequeña de España recurre a inmigración por falta de vocaciones

Ciudad Rodrigo (Salamanca), 7 may (EFE).- La falta de vocaciones ha conllevado que la diócesis salmantina de Ciudad Rodrigo, la más pequeña de España, haya tenido que recurrir a curas y a monjas de África y América, para que estén atendidos conventos y parroquias de zonas rurales muy despobladas.

De esta manera, en los cuatro conventos de clausura de la Diócesis de Ciudad Rodrigo hay monjas, en algunos casos la totalidad, procedentes de países como Perú, México o Kenia.

Lo más llamativo ha tenido lugar en los últimos días, tras la decisión del obispo diocesano, Atilano Rodríguez, de nombrar párroco de Barruecopardo y Cerezal de Peñahorcada, dos poblaciones rurales, a Jean Claude Bizimungu, de nacionalidad ruandesa.

Bizimungu, en declaraciones a Efe, ha asegurado que lejos de lo que pueda parecer, ha tenido "una acogida extraordinaria, ya que la gente de campo tiene el corazón muy abierto".

La Diócesis de Ciudad Rodrigo es, además, una de las más envejecidas, con una media de edad de sus curas de 64 años, dos por encima de la media nacional, del total de 58 sacerdotes que aún permanecen en activo.

La votos eclesiásticos de personas inmigrantes han hecho posible que aún permanezca activo el conocido convento de El Zarzoso.

Aquí sólo hay monjas que vinieron hace trece años, todas procedentes de la Tercera Orden Franciscana de México.

Se trata de siete monjas que hicieron posible que en 1993 no desapareciera este convento, en el que sólo quedaban tres monjas muy mayores.

"Fue el entonces obispo de Ciudad Rodrigo, Julián López, el que, durante un viaje que hizo a México en 1992, logró, tras conversar con la entonces presidenta de la Federación Franciscana de México, Evangelina Gómez, que varias monjas de allí, de la Orden Regular de San Francisco, nos asentáramos aquí", ha explicado a Efe la superiora de El Zarzoso, Magdalena Hernández Leal.

Las siete mexicanas han adquirido todas las costumbres de sus predecesoras españolas, por lo que se afanan, a diario, en la elaboración de dulces típicos.

Una de ellas, Soledad Nieto, ha matizado que en la elaboración de dulces "hemos logrado introducir variedades de México, como los palitos de nata, las galletas de vainilla o el bocado de dama, que es muy parecido al mantecado pero con yema de huevo".

Además, las monjas de El Zarzoso también hacen de pastoras con un rebaño de ovejas que mantienen en el recinto del convento.

Otro de los conventos de clausura que se nutre de vocaciones extranjeras para su supervivencia es el de las Carmelitas Descalzas de Ciudad Rodrigo, donde cinco de ellas son de España y el resto de Perú, que dedican la mayor parte de las horas del día a la elaboración de ornamentos religiosos con bordado.

La falta de vocaciones en la Diócesis de Ciudad Rodrigo es tal que en algunos arciprestazgos tres curas están al frente de trece parroquias o, lo que es lo mismo, de trece pueblos diferentes.

Por eso, algunas monjas se tienen que encargar de dar la tradicional misa de los domingos, lo que en el argot eclesiástico se denomina "celebración dominical en ausencia de presbítero".

http://www.xornal.com/artigo/2009/05/07/sociedad/buscan-devotos-desesperadamente/2009050714100223736.html